...y Besarte, si. Pero única y exclusívamente, cuando sea inevitable...

20 enero 2011

Carta:

Amo el silencio que provoca la distancia,

Y amo un susurro despacito, al oído.

Amo el calor de una tarde de verano,

Y amo sus brazos abrigándome,

Desnudo, ante la brisa fría,

De este amanecer de invierno.

Amo mi desdicha, como amo la alegría,

Así como amo el silbido del viento,

El romper de las olas,

Y la calma…

Amo sus vidas, y la mía.

Sus vidas…

La del árbol, de su sombra,

La de un perro,

La tuya, la de él, la de ellos…

Amo despertar día tras día,

Y amo la noche…

Mientras sueño, también duermo.

Amo gritar, de ira,

Regalar lo que siento,

Y callar, cuando mi voz ya no puede,

Y amo también llorar,

En una copa de cristal,

Y rota…

Amo lamer como un perro,

Aullar como un lobo, de mar,

Tocar como un curioso niño,

Ansioso,

Mirar, como gaviota en vuelo…

Y escuchar,

Escuchar el mar sobre mis hombros,

Y el agua, tan fría,

Subiendo por mi cuello…

18 enero 2011

A razón de Nada

Tengo tantas ganas de que todo se vuelva nada,

A razón de nada,

Corazón de todo,

Nada las palabras,

Nada la mirada,

Nada la vida…

El hombre nada.

Nada tu voz, y tu sombra.

Nada el rico y nada el pobre,

Nada los sueños.

Tengo ansias de nada,

Y corazón de todo,

Nada como pena y toda la nostalgia,

Nada las cadenas, estar libre y de nada,

Nada, las heridas…

Nada el sacerdote,

Nada de Dios,

Y no quiero saber de nada,

Nada la belleza,

El amor, la tristeza, nada…

Nada la vida,

Entre mar olvidado,

Nada el civil,

Nada el soldado…

Nada tus prejuicios y mi ego,

Nada.

Dichoso sea el ciego,

Que nada ve,

Y lo imagina todo.

Ante ojos que todo ven,

Y nada sienten.

Nada, viven.

Que todo se vuelva todo,

Para olvidar un segundo de olvido…